En Surfyspot puedes disfrutar de las mejores clases de surf y surfcamps. Elige la ubicación, si quieres clases o un campamento, y…¡al agua! Esta semana queremos hablarte un poco más de la escuela de surf Ondas Novas, ubicada en la playa de Pantín. Hablamos con su fundador, Pedro, para conocer un poco más a fondo esta nueva escuela en el paraíso gallego.
Ondas Novas by Pedro Navarro
Eu son Pedro. Un rapaz da aldea. Coma quen di, un ninguén.
Así se describe Pedro Navarro, la cara detrás de la escuela de surf Ondas Novas, en alusión a la literatura de la tierra adoptiva de este catalán, Galicia. Pedro es un profesor independiente que enseña con cariño, paciencia y sesiones individualizadas a cada alumno. Una nueva onda a la hora de aprender a sufear junto a la playa de Pantín. Hablamos con él.
¿Cuál es tu historia en el mundo del surf? ¿Cómo y cuándo empezaste?
Llevo surfeando desde hace una década. Residía en Bilbao y mis compañeros de piso eran surfistas. Como no hablaban de otra cosa me compré una tabla para ver de qué iba la movida. Y, en menos de dos años, estaba tan viciado que me compré un vuelo a Sri Lanka y dejé un trabajo indefinido que me encantaba.
¿Qué es el surf para ti?
Un juego. Un juego muy mágico que me hace mucho bien.
¿Y por qué Galicia? ¿Cómo acabó un catalán viviendo en Pantín?
En el 2017 vine para hacer la temporada de verano y me enamoré de la naturaleza, los paisajes, la limpieza del entorno y toda la idiosincrasia gallega.
¿Qué necesita cualquier persona para aprender a surfear?
Tabla, neopreno y alguien que te enseñe cómo no meterte en el lío. Si tienes amistades que surfean genial y si no, para algo estamos las escuelas de surf.
¿En qué se diferencia Ondas Novas de otras escuelas?
La diferencia es que yo soy un monitor independiente. La calidad del servicio de Ondas Novas depende de mí mismo y de nadie más. Soy profesor de Educación Física y socorrista acuático con el nuevo certificado de profesionalidad y mi objetivo es enseñar el surfing de manera profesional, con cariño, paciencia y con estrategias totalmente individualizadas para cada alumno.
Además, Ondas Novas tiene su propio plan de voluntariado para hacer llegar el surfing a aquellas personas que se puedan beneficiar de él como herramienta terapéutica.
¿Utilizas algún tipo de metodología especial?
Realizo entrevistas con mis clientes habituales en las que trato de conocer su vínculo con el deporte y el agua en profundidad. Creamos objetivos personalizados y realistas en base a sus deseos y tiempo disponible.
En mis clases añado elementos del bodyboard, la natación, el surf clásico, el yoga, la gimnasia hipopresiva y la apnea. Con ello busco dar a mis alumnos las herramientas para sentirse libres en el agua y en el line up.
¿Algún reto al que te hayas enfrentado como surfista?
Cuando empezaba a surfear me llevé un buen susto que limitó mucho mi evolución. Eso me permite empatizar con la gente que siente ansiedad en el agua y puedo compartir con ell@s las herramientas que me ayudaron a superar ese miedo.
¿Un objetivo a largo plazo?
Ser parte del cambio en la industria del surf para conservar aquellos elementos que nos hacen un atractivo turístico hoy en día. Debemos generar ingresos sin cargarnos las playas, masificar las rompientes y echar a la población local con los pisos turísticos. En 10 años me gustaría que toda mi equipación proviniese de materiales sostenibles, llevar a un alumn@ al pódium de un campeonato gallego y dar muchas más clases de surf adaptado.
Un tip para un cualquier alumno
Paciencia. En el aprendizaje del surfing siempre das dos pasos adelante y uno hacia atrás. La mayor parte de estancamientos que veo en clase son debidos a la insuficiencia del tiempo. Después hay toda una serie de errores en cada fase: Apoyar mal el pie trasero, mirar hacia abajo, posicionarse mal en el agua etc. A los alumnos de nivel intermedio les recomiendo siempre la videocorreción.
¿Cómo ves el futuro del surf?
La industria del surf descubrirá nuevos materiales biodegradables que sustituyan todos los derivados del petróleo que se utilizan en neoprenos y tablas. Tiktok pondrá de moda otros deportes como la marcha nórdica, la gente se irá la montaña y yo me quedaré tranquilo en Pantín con mi perrita dando clases sólo a colectivos en riesgo de exclusión social. Sería ideal. Aunque en la realidad creo que aún nos quedan unos años por delante de masificación y gentrificación. Desde mi posición intentaré enseñar que existen las tablas de madera, el buen rollo en el agua, las normas de seguridad y el respeto a la población local y al entorno que nos rodea.
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